Las ventas en el Mercado Jesús Terán se mantienen en 50 por ciento menos a comparación con el mismo periodo del año pasado debido a la pandemia y al temor de algunas familias de acudir al primer cuadro de la ciudad a realizar sus compras, señaló Gerardo Durán representante de los locatarios de dicho lugar.
Debido a las bajas ventas, los 450 comerciantes del lugar han tenido que hacer recorte de personal quedándose únicamente con un empleado para tratar de mantener el negocio, ahorrándose de esta forma el pago de salario lo que les ha ayudado a mantenerse estables.
A pesar de la dura situación por la que atraviesan confían que en el mes de diciembre por las festividades navideñas y de fin de año se reactiven sus ventas y por ende sus ingresos además de invitar a la gente a acudir a consumir.