Visita sorpresa realizaron la semana pasada ambientalistas al Relleno Sanitario San Nicolás por fuera, para detectar si sigue funcionando sin resarcir las malas prácticas en el manejo de los deshechos, desde ahí apreciaron algunas irregularidades y las captaron en fotografías, denunció la ambientalista Gina Ventura.
Esto luego que la administración municipal de Teresa Jiménez no quiso tomar cartas en el asunto cuando los ambientalistas catalogaron el relleno como un tiradero a cielo abierto, dejándole un serio problema a Leonardo Montañez con quien esperan tener una reunión para exponerle las necesidades que en materia ambiental se requieren en la capital.
La activista reconoció que la solicitud va dirigida a las autoridades de los tres niveles de gobierno quienes tienen la responsabilidad de tomar cartas en el asunto del Relleno Sanitario, para que funcione sin poner en riesgo la salud de la población, por los malos olores que emite por los gases y la contaminación al subsuelo.
