La concesionaria Veolia hace su agosto en plena contingencia sanitaria, a pesar que la alcaldesa Tere Jiménez ha instruido a las direcciones y secretarías para ser más flexibles en los pagos de los servicios con la intención de apoyar a la economía familiar que se ha visto afectada con los paros laborales que mantiene a los aguascalentenses en el aislamiento en sus casas y viviendo con la mitad de su salario.
Sin embargo, tal pareciera que la empresa concesionaria no obedece lo instruido por la autoridad a pesar que ellos fueron contratados con la finalidad de ayudar a mejorar la administración del servicio del agua potable.
Usuarios se quejan de haber pagado el recibo correspondiente al consumo del periodo de diciembre-enero un día antes del vencimiento del recibo que fue el 03 de marzo, e inmediatamente después llega otro recibo con vencimiento al 29 de marzo, 26 días después por lo consumido en el mes de enero y febrero, al acudir a pagar a un cajero de la empresa le dicen que ya hay otro recibo en puerta.
Aún con la contingencia sanitaria se siguen presentando las eternas denuncias que realizan a este noticiero, que de uno a otro recibo varía el cobro un peso de más, no cabe duda que mientras la alcaldesa trata de apoyar a la economía familiar hay otros que no les importa la situación por la que atraviesa la población y a toda costa quiere el pago por sus servicios de manera puntual y a veces hasta les cortan días al mes para recibir los pagos.