Noruega afirmó este miércoles que su salmón no era la causa del rebrote de la COVID-19 ocurrido estos últimos días en Pekín, donde enseguida se detuvo la venta del emblemático pescado noruego.
“El caso se está resolviendo”, declaró el ministro de Pesca, Odd Emil Ingebrigtsen, citado por la agencia TDN Finans. “Estamos trabajando actualmente en los detalles y puedo confirmar que el caso parece resuelto”.
Responsables chinos y noruegos se reunieron el martes y concluyeron que el salmón noruego no parecía ser la causa del virus detectado la semana pasada en el mercado mayorista de Xinfadi en la capital china, afirmó según medios noruegos.
Al menos 137 personas han resultado contagiadas desde la semana pasada en Pekín, un rebrote de infecciones que ha acarreado el cierre de varios barrios y la cancelación de más de mil vuelos. Los medios oficiales informaron que el virus había sido detectado en el mercado de Xinfadi en las tablas utilizadas para cortar el salmón importado.
Grandes cadenas de supermercado, como Wumart o Carrefour, eliminaron el salmón de sus puestos y el Centro de Productos del Mar de Noruega, organismo encargado de promover las ventas de pescado noruego, informó de la anulación de varios pedidos.