Se disparó la compra de bebidas embriagantes en el municipio de la capital al igual que en el resto del país hasta en un 40 por ciento más en los últimos quince días a consecuencia del distanciamiento social por el Coronavirus, admitió el director del Centro de Integración Juvenil (CIJ) Mario García al señalar que no sería factible la aplicación de la ley seca debido a que la gente saldría a comprar en grandes cantidades porque lo utiliza como un medio para recreación.
Sin embargo recordó que el consumo en altas cantidades genera problemas en algunas personas como la violencia, agresiones, depresiones y conductas impulsivas que son comprensibles tomando en cuenta que la gente ya tenía planes por las vacaciones de semana santa y Feria de San Marcos que se vieron truncados por el aislamiento por el virus.
Las cerveceras además siguen produciendo sin embargo lo que es la distribución se redujo por el tema del COVID debido a que enviaron a algunos de sus trabajadores a resguardarse.