Tras la liberación de las ocho mujeres que participaron en la marcha del 8 de marzo al no comprobarse de manera efectiva que cometieron los delitos que se les imputaban como: lesión dolosa, daño en las cosas y resistencia a particulares; el Observatorio de Violencia Social y de género se comprometió a armar mesas de diálogo con las colectivas y feministas para buscar que en próximos movimientos se haga de la manera más segura posible tanto para las participantes como para la sociedad y sin afectar a terceros, evalúo la coordinador estatal del Observatorio de Violencia Social y de Género Violeta Sabás.
La activista expuso que a pesar de que fueron liberadas la totalidad, algunas deberán seguir un proceso de investigación abierto de quienes están solicitando a las autoridades les impongan medidas reparatorias para detener el proceso, por eso ve positivo que de las 22 mujeres detenidas el 8M y 3 hombres; 13 fueron liberadas en el transcurso de la madrugada del 9 de marzo al comprobarse que no fueron participantes de la marcha y el resto al cumplir las 48 horas de arresto.
La activista indicó que del total de las detenidas algunas prevén levantar denuncias por lesiones que recibieron de los policías durante la detención y siguen en espera a que la CEDH que inició una queja de oficio, a la que se sumarían con testimoniales, para que el ombudsman emita una recomendación general a las corporaciones policíacas.
