Denuncia el presidente estatal de abarroteros de Aguascalientes Antonio Hernández que la PROFECO es un cero a la izquierda en la entidad, debido a que se ha convertido en una institución recaudadora a través de las empresas verificadoras que contrató para checar pesas y medidas en las negociaciones.
Expuso que compañías concesionadas como Unidad de Verificación Autorizada (UVA) junto con once más y personas que se hacen pasar como trabajadores de esa empresa, han comenzado a extorsionar a los tenderos, porque a pesar de tener todo en regla al concluir con la revisión les han aplicado multas por no contar con el holograma de verificación, que van desde 3 mil hasta 10 mil pesos con tal de no cerrarles su establecimiento cuando su labor es defender a los consumidores y no recaudar.
El presidente de la organización incluso consideró innecesarias las calibraciones de las básculas que son electrónicas que están programadas por sistemas, sin embargo se siguen realizando estas prácticas.